
Muchas personas confunden la artritis con la artrosis, ya que ambas afectan a las articulaciones y pueden causar dolor o rigidez. Sin embargo, son dos condiciones distintas con causas, síntomas y tratamientos diferentes. En este artículo te explicamos qué diferencias hay entre artritis y artrosis, cómo reconocerlas y qué puedes hacer para mejorar tu calidad de vida.
La artritis es una enfermedad inflamatoria que afecta a las articulaciones. Puede tener diferentes causas, como una reacción autoinmune (el cuerpo ataca sus propios tejidos), una infección o incluso el desgaste provocado por otras patologías.
Existen varios tipos de artritis, siendo la más común la artritis reumatoide. Esta enfermedad suele afectar a personas más jóvenes que la artrosis y puede implicar varias articulaciones al mismo tiempo (manos, muñecas, rodillas, tobillos…).
La artrosis, en cambio, es una enfermedad degenerativa del cartílago articular. Suele aparecer con la edad o tras años de sobrecarga o lesiones. Es decir, el cartílago que recubre las articulaciones se desgasta y provoca que los huesos rocen entre sí.
Las zonas más afectadas son las rodillas, caderas, manos y columna vertebral. Es mucho más frecuente a partir de los 50 años y afecta más a mujeres que a hombres.
Tanto en la artritis como en la artrosis, mantener una movilidad articular adecuada es fundamental. En ColumnaQuiro, en Ruzafa (Valencia), ayudamos a nuestros pacientes a reducir el dolor, mejorar la función articular y prevenir el avance del desgaste mediante un enfoque integral que incluye:
Un cuidado constante puede marcar la diferencia en tu bienestar diario.
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No tienen cura definitiva, pero sí pueden controlarse y mejorar sus síntomas con tratamiento, ejercicio adecuado, dieta antiinflamatoria y cuidados quiroprácticos o fisioterapéuticos.
La artritis suele provocar inflamación, calor y dolor incluso en reposo, mientras que la artrosis causa dolor con el movimiento y rigidez al levantarse o después de estar inactivo. Un diagnóstico médico o radiológico es clave para diferenciarlas.
Los ejercicios de bajo impacto como nadar, caminar, yoga o pilates ayudan a mantener la movilidad sin sobrecargar las articulaciones. En ColumnaQuiro te orientamos sobre qué tipo de actividad es más adecuada según tu caso.
Sí. La quiropráctica puede mejorar la movilidad, reducir la tensión muscular y aliviar el dolor articular. Además, ayuda a mantener una mejor postura y prevenir el avance del desgaste.
La principal diferencia entre artritis y artrosis está en su origen:
Reconocer los síntomas y tratarlos a tiempo es esencial para mantener tus articulaciones sanas y activas.
Si notas dolor, rigidez o pérdida de movilidad, te recomendamos acudir a un profesional para una valoración personalizada.